Odontología conservadora
La principal función de la odontología preventiva es tratar de restaurar aquellos tejidos del diente que han sufrido daños y están afectados con el objetivo de evitar la extracción del diente.
Intentamos siempre ser lo más conservadores posibles en nuestros tratamientos limpiando y tratando los tejidos dañados sin afectar al resto del diente, de aquí la importancia de las revisiones periódicas.
Una buena higiene, la mejor prevención
Los cuidados que les demos a nuestros dientes durante el día a día se van a ver reflejados en la duración de los mismos. Lo ideal es mantener la boca y las piezas dentales sanas para que los dientes perduren toda la vida. Esa es precisamente la finalidad de la odontología conservadora: conservar las piezas dentales y sus tejidos en buen estado para evitar, en la medida de lo posible, extracciones.
La falta de tiempo o la falta de costumbre son dos de los principales motivos por los que descuidamos nuestra higiene oral. Una mala rutina diaria de cepillado y lavado bucodental pueden llegar a influir en el desarrollo de patologías que necesitarán tratamiento profesional en una clínica dental.
Las principales afecciones bucodentales
Las principales afecciones bucodentales que son consecuencia directa de una mala higiene dental pueden suponer problemas de salud:
- Placa. Son bacterias que se encuentran en la cavidad oral y que, mediante la higiene dental, no se han llegado a eliminar. Si nuestros dientes y encías están expuestos a la placa durante mucho tiempo, puede derivar en enfermedad periodontal.
- Caries. El tejido de los dientes se destruye debido a la presencia de ácidos en nuestra boca, consecuencia de la placa bacteriana acumulada en la superficie del esmalte de las piezas dentales.
- Gingivitis. Se produce por la acumulación de placa bacteriana en el cuello de los dientes. Afecta de manera directa a las encías, produciendo inflamación, enrojecimiento y sangrado durante el cepillado.
- Periodontitis. Es una enfermedad periodontal que se origina cuando la gingivitis no se ha tratado o no se ha curado adecuadamente. En estados avanzados puede provocar recesión gingival y pérdida de hueso.
Limpiezas
Generalmente está indicado realizar una limpieza dental al año, aunque en algunos casos recomendamos realizarla cada 6 meses.
Es un tratamiento indoloro y no desgasta los dientes. Se utiliza diverso instrumental (ultrasonidos, curetas, cepillo eléctrico, aerobicarbonato…) para limpiar los dientes, eliminar el sarro y la placa acumulados en la unión del diente con la encía. Si sus encías son delicadas puede notar una ligera sensibilidad a los cambios térmicos, que desaparecerá antes de 10 días.
Obturaciones
La obturación es una técnica que se utiliza para reparar una pieza dental dañada o con caries y devolverle su forma, función y estética ideal. Retiraremos la caries minuciosamente y rellenaremos la zona afectada con un material que suele ser, en la mayoría de los casos, composite del color del diente.
La duración en boca depende del tipo de paciente: higiene bucal, zona y pieza afectada, si rechina los dientes o muerde objetos…
Cuidamos de tu boca y de ti